viernes, 5 de diciembre de 2008

Feliz Navidad





Confío en que algún día comprenderemos y aprenderemos...

(Visto en menéame)


7 comentarios:

Anónimo dijo...

La primera vez que visité el museo de la paz de Hiroshima, con restos, evidencias y testimonios de la bomba, salí con muy mal cuerpo y con ganas de patear culos yanquis.

Recuerdame que busque las fotos de allí.

Señor R dijo...

De eso hace mas de 60 años, y nunca más se volvió a tirar ninguna de esas....creo que algo han aprendido, no te parece?

servidora dijo...

"Finalizada la guerra fría, suponiendo que realmente haya finalizado con todas sus escenas, y tras el desmantelamiento provocado de la URSS, siguen existiendo unas 27.000 armas atómicas en el mundo, 12.000 de las cuales -¡el 44,4%!- están desplegadas activamente."

A construirlas y almacenarlas... para iluminar el belén, supongo...

Señor R dijo...

Ya. Es cierto que aun hay mucha basura por ahí.....pero como reza el viejo dicho "El que tiene culo tiene miedo". Conclusión es más fácil construirlas y almacenarlas que tirarlas.

Además no se puede ser tan pesimista en Navidad :) (Aq a mi la navidad me da cien patadas en el culo :) )

Anónimo dijo...

¿Aprender? El hombre no aprende.. y los que menos aprenden de todos son los políticos.

Por suerte, hasta ahora han tenido que lidiar con demasiados nºs como para poder atacar impunemente con las armas esas.

Anónimo dijo...

Tiene que ser terrible sobrevivir a algo así y ver que en unos segundos todo tu mundo desaparece.

Perico dijo...

Yo lo tengo en mi biblioteca. No sé qué es peor, si la explosión de la bomba o lo que viene después. Un día te cuento :I

Por cierto, no hace muchos años y algunos después de la desmembración de la antigua URSS, hubo un responsable del organismo internacional para la energía atómica que afirmaba que más de uno no dormiría si supiera del actual estado de las armas atómicas en ese momento. Obviamente, días después le obligaban a rectificar. Cosas de la vida...

Buen post Glo, altamente recomendable para más de un descerebrado.