domingo, 23 de noviembre de 2008

Cosas para las que nadie te ha preparado


Deprisa, deprisa... había que cruzar todo Castellón, que María tenía un partido de balonmano y había que estar a las doce menos cuarto en la otra punta de la ciudad... Íbamos ya por la calle Herrero con la lengua de fuera y hubo que pararse en un semáforo...


- Mamá, en el cole estuvimos escuchando la quinta sinfonía de Beethoven...
- La la la fa...
- ¡Esa! Y fue muy raro porque nos esperábamos música tranquila, pero era todo el rato de estar saltando en la silla y como dando muchos golpes al piano...
- María, que Beethoven será cualquier cosa menos tranquilo, hija... pues no mete caña ni nah (¡tiembla Toni Iommi... !)
- Pues sí, eso nos dijo la profe, que era como los rockeros de ahora (será como los de antes, pensé yo ahí)... y además nos pusieron la que tengo que tocar a veces en la flauta...
- ¿La novena?
- Sí, y era muy chula...
- Pues imagina, estaba todo sordo el pobre, cuando la compuso...
- Ya lo sé, que nos pusieron un trocito de "Copying Beethoven" y salía la chica que le ayudaba...
- ¿Síiiii?
- Sí, salía metida en un agujero entre él y la orquesta, y le iba diciendo cómo iba... Y ¿sabes? en aquella época la gente iba con tomates y botellas y cosas para tirarle al músico si no les gustaba lo que había compuesto...
- ¿Yyyyyyy?
- Pues que como no oía, al acabar notaba como un ruido raro y se pensaba que le iban a tirar cosas y se puso triste, pero la chica le dijo "¡Date la vuelta! ¡¡qué les ha gustado mucho!!" y se dio la vuelta y todo el mundo aplaudía mucho... dice la profe que esa sinfonía fue la caña en su época... ¡Jo, qué gente! ¿no? El pobre va a tocarles lo último que ha compuesto y aquellos dispuestos a tirarle de todo, qué brutos...



Y aquí la conversación empezó a decaer, porque una servidora empezó a hacer comparaciones odiosas con triunfitos y otras huestes diabólicas. Y, además, estábamos ya en la calle de conservatorio, eran las once y media y nos podíamos permitir empezar a andar algo más despacio, llegábamos de sobra al partido...





5 comentarios:

Gin dijo...

Cómo me ha gustado eso de: (será como los de antes, pensé yo ahí)

:D

Mars Attacks dijo...

Qué bonito, me ha gustado tanto la charla en sí como sus implicaciones.

Por cierto, dile a María que Copying Beethoven se permite el lujo de inventarse partes de la historia (como por ejemplo la existencia de la copista) para explicarla mejor. Pero aún así, Beethoven tiene otras historias muy bonitas (como la que dice la leyenda que compuso "Para Elisa" en honor de una muchacha aprendiz de piano de la que probablemente se enamoró y quien se quejaba de que sus piezas eran demasiado complicadas).

Ea, a por los otros :)

Anónimo dijo...

Y cambiando de tercio... ha visto ya Amadeus? :P

Anónimo dijo...

Esas charlas geniales... Digo yo Mozart seria como un Syd Vicius o un Syd Barret ?

servidora dijo...

Barret, hombre, Barret... ¡¡dónde va a parar!! :-D