sábado, 11 de febrero de 2006

Vinilos, CDs, mulas, piratas y demás fauna...

Estaba pensando que me emocioné tanto al descubrir la web de Alex de la Nuez, que la entrada de ayer me quedó cutre cutre...

Tienen ante ustedes a una persona que vive en estado permanente de mosqueo con los CDs desde que aparecieron. Me explico: no concibo la vida sin música. No encontrar "ecos" de música en mi cabeza suele ser equivalente a estar a punto de cabalgar mi depre periódica.. si no tengo una cancioncita a punto para canturrear, se puede creer que estoy chunga. Tener buen oído y buena memoria musical me ayuda a sobrellevar dignamente la limitación que supone tener muñones en lugar de dedos, lo que me hace ser negada con cualquier instrumento musical, y de ser una analfabeta musical, y de... morirme de envidia ante cualquiera capaz de componer.

Vale ¿y el mosqueo, por qué? Vamos unos lustros para atrás... vinilo ¿os acordáis? ¿os lo han contado vuestros mayores? Todo un ritual: coge la carpeta, coge el LP con cuidado, quita esa motita de polvo, al plato, ajusta la aguja y ¡cómo sonaban las rayas!... Cuando empecé a cobrar mis primeros sueldos, es muy posible que el 30% de ellos se me fuera en pedidos a Discoplay, a riesgo de pasar los últimos días del mes comiendo sólo patatas... llegaba el boletín a casa y empezaba a babear entre novedades y ofertas de discos antiguos y cualquier cosa rara que apareciera por allí.

Que sí, que ya va lo del mosqueo: como por 1990 empezaron a aparecer en el catálogo los CDs. Mi santo y yo flipábamos: si un LP normal nos costaba 800 cucas, el CD estaba a 2500 o más. Yo no entendía nada: si algo me quedaba claro es que el proceso de grabación digital es más barato y fabricar el soporte ¡ni te cuento! ¿Por qué eran tan caros? Pensamos que sería cosa de la novedad y dijimos, "bueno, ya bajarán...".

No han bajado. Y, lo que es peor, el negocio discográfico se fue haciendo más y más patético. Me van ustedes a perdonar si reivindico los 80: es que eran "mis" veinte años... y yo creo que la música de los veinte años es, seguramente, la que te queda más adentro ¡cómo que es la banda sonora de las movidas más locas, de los pensamientos más salvajes y de los sentimientos más a flor de piel!. Pues eso: como buena hija de los 80, viví los 90 con resignación ... ¡yo no veía nada nuevo bajo el sol! No había nada en las tiendas de música que me llamara la atención (de seducción, mejor ni hablamos...). Lo del 2000 y la irrupción de triunfitos fue peor pero, afortunadamente, encontramos otra forma de conseguir, explorar y disfrutar de la música. ¿Tengo qué decir cuál? :-)

Los CDs me siguen pareciendo caros; aún así, compro... en los cajones de oferta. Lo siento: no me creo que ningún CD valga más de 10 euros. Y ya me parece mucho. Y tal y como está el negocio, lo que se pase de eso es inflar el trozo de pastel de las discográficas, de las grössen discográficas que no entienden de cultura y cuyo único esfuerzo está en llenarse el saco... que no hacen nada para que la gente que tiene ganas y cosas de decir de verdad tenga su oportunidad. Sólo trabajan sin arriesgarse, sin amar la música, sólo el negocio. Y paren triunfitos y max-mix-remix de lo que ya sabemos que vende. Habrá piratas, sí; pero creo que mi concepto de pirata no es el habitual... O igual no hay piratas, sólo tiburones.

Me gustan los músicos que se atreven a romper con ese vasallaje. Cada vez que encuentro uno, pienso que, a la larga, serán las grossendiscotiburones las que tendrán que pasar por el aro. Seguramente encontrarán otra forma de fastidiarnos y seguir haciéndose de oro, pero espero por lo menos dejen de insultarnos. Es muy duro explicarle a mi hija que soy sospechosa de compadreo por ser informática (ahora que ya le he convencido de que no soy pederasta, pero eso es otra historia... ¿qué culpa tenemos los informáticos de que ciertos cabrones usen ordenado-res?)

Precisamente, antes de navidades comentaba con amigos que podía ser buenas fechas para hacer "promoción" de los que se han separado de este tipo de explotación. Acaba de pasarme por la tienda de Kiko Veneno y habían tenido un detallito muy guapo conmigo... Acababa de encontrar la página web de Xera en la que presentan su música bajo licencia Creative Commons... Gracias a Txarly descubrí a James Apollo... Y no hay que olvidar sitios como Música Libre, Magnatune y similares.

Creo que voy a inaugurar oficialmente una lista de enlaces a músicos de verdad, a los que quieren crear y que se escuche su música... os podéis suponer que se admiten donaciones ;-)

7 comentarios:

Anónimo dijo...

bueno, si tienes muñones, siempre puedes probar con la batería no?

servidora dijo...

...jopé, acabo de verme a mí misma con las baquetas en los quiños! :-/

no sé, no sé ;-)

Aniwiki dijo...

hola servidora, te he dejado un regalito en mi blog, bueno es juego de esos raros q me han pasado, una cadena literaria, pero nadie está obligado a hacerlo eh :P Saluditos y nos leemos por este mundillo bloguero ;)

Anónimo dijo...

Muy buenas!

Pues... yo comencé con esto del pop grabándome cintas en el equipo hi-fi de mi padre hace ya unos cuantos años. En cuanto podía permitirme el lujo, me compraba algún cd, pero a 3000 pelas la novedad, el lujo no se daba muy a menudo... Hasta que en el 98 o 99 me hice con mi primera grabadora de CDs: una velocísima Sony a 2X! Esto coincidió con la época dorada de esas tiendas de alquiler de CDs (que la SGAE fulminó hace 3 o 4 años) y en poco tiempo la cosa se convirtió en una obsesión que me hizo acumular más de 1000 CD-R en casa. Y ahora? Bueno, hace un par de años me di cuenta de que esos cds no tienen ningún valor y ocupan demasiado espacio, así que pasé a mp3 los que me interesaban (más o menos la mitad), y los regalé a amigos, parientes y ex-novias varias :P Desde entonces, sólo "consumo" música en mp3, y de vez en cuando me doy el capricho de pedirme algún vinilo en Amazon. Porque el vinilo si que es un objeto que valoro y no es algo tan impersonal como el CD, y además, reconozco que hay algo de fetichismo en esto.

En cuanto a lo de la música con licencia Creative Commons, yo creo que es algo que no termina de despegar. Los músicos que huyen de las "majors" graban en sellos independientes, pero al final todos pasan por el aro de la SGAE. Miedo o desconocimiento? No lo sé. Ese sería un buen tema a investigar.

Anónimo dijo...

Por cierto, tengo un meme pendiente contigo. En cuanto me libere de mis trabajos de pretecnología (es lo que tiene estudiar diseño), me pongo a ello ;)

Anónimo dijo...

En cuanto a lo de la música con licencia Creative Commons, yo creo que es algo que no termina de despegar. Los músicos que huyen de las "majors" graban en sellos independientes, pero al final todos pasan por el aro de la SGAE. Miedo o desconocimiento? No lo sé. Ese sería un buen tema a investigar.

Parece que no todos, o al menos eso aseguran los de Xera en este hilo de Barrapunto.

Los de La Mundial.net tampoco parecen muy por la labor.

servidora dijo...

Anónimo, gracias por el enlace! :-)

Y txarly, yo no sería muy pesimista en esto del copy left. Los informáticos se supone que deberíamos estar todos al loro con el tema del software libre y ... no te digo yo abrazarlo como una religión (o sí :-), pero aún hay quien no tiene claro de qué va... No puedo exigirle más a los músicos...

Igual es optimismo enfermizo, pero... de poquet a poquet (sin prisa, pero sin pausa... :-)

besos...