viernes, 29 de agosto de 2008

Una última copa



"No te vayas aún, vamos a pedir otra copa. No quiero volver ya a casa. No recuerdo tu nombre... tampoco recuerdo el mío, ni siquiera sé si volveré a utilizar un nombre... estoy harta de palabras. No, no necesito saber cómo te llamas, ni necesito saber cómo me llamo... tampoco necesito las palabras. Lo que necesito es que me vuelvas a coger la mano y después, quizás, que me beses... pero ahora sólo necesito tu mano apretando la mía, mientras callo todo lo que intento olvidar y mientras olvido todo lo que tenía pensado callar. ¿Raro? No, no es raro, casi todas las relaciones se basan en los silencios, cuando estos te lo dicen todo. O cuando lo que callas dice más que lo que dices. O cuando expresa lo que piensas a pesar de lo que dices. Y las relaciones se joden cuando empiezan a basarse en lo que dices, a pesar de lo que piensas... o a guiarse por lo que dices, a pesar de lo que sientes... Sí, seguramente tienes razón y es una tontería... no olvides que estoy borracha. Pero borracha he aprendido que no sé manejar mis sentimientos. Que no sé ordenarlos, como no sé ordenar mis papeles. Que no quiero ordenarlos porque amor siempre va el primero en orden alfabético, pero después siempre se queda atrás y le pasan los otros por delante y acaban todos desordenados... No sé manejar mis sentimientos, nunca me han enseñado, nunca he querido aprender... y me quedo a solas con mis silencios... sin saber decir lo que siento y diciendo cosas sin sentido... O pensando cosas sin sentido...

Pero cómo vas a enterarte de lo que estoy pensando si estoy aquí callada sin hablarte... coge mi mano, abrázame, no te vayas y quédate conmigo. Por lo menos hasta que me venza esa última copa o hasta que explote en tus brazos. Mañana con la resaca te habré olvidado, no temas..."

18/03/07, 01:10



Me lo he encontrado entre los borradores. Lo escribí en marzo de 2007 y al verlo sólo he pensado en que era un curioso ejercicio de narrativa dramaticoide. Me he sonreído al leerlo y he sido rotunda al marcar el tag de estoyMintiendo. Después, he vuelto a sonreír y al levantar la vista me he fijado en lo azul que está hoy el cielo. Se está bien aquí, metida en mi vida... Gracias por ayudarme a no perdérmela.

No hay comentarios: